Por Clara Jiménez Cruz
Basada en una novela de John Steinbeck y galardonada con el Oscar a Mejor director de la mano de John Ford, Las uvas de la ira muestra la situación de pobreza en la que se encuentra la familia Joad durante la Gran Depresión, razón por la que se ve forzada a empaquetarlo todo en su vieja camioneta y abandonar Oklahoma camino de California en busca de un futuro mejor.
Sacar a colación esta película en el momento que estamos viviendo tiene su razón de ser, ya que si la actualizásemos probablemente tendríamos una foto del panorama actual. Ver esta película teniendo en cuenta lo que esta sucediendo ahora en el mundo es un ejercicio de reflexión bastante útil para ayudarnos a comprender lo que nos ha llevado a esta crisis y el por que no encontramos responsables a la misma.
En un momento de la película hay una conversación entre un encargado de una de las multinacionales y el padre de los Joad encarnado por Henry Fonda en el que la única conclusión a la que se llega es que son las multinacionales las culpables de lo que esta ocurriendo, pero estas no tienen responsabilidad legal, ya que no hay cabeza de turco: NADIE ES LA MULTINACIONAL.
Recuperen esta película desde los ojos de la actualidad y comparen, saquen sus propias conclusiones (probablemente no sean muy diferentes de las de Tom Joad, sufran con Ma Joed (interpretada por Jane Darwell, que gano un oscar con este papel), una mujer que sin entender muy bien lo que esta pasando lucha por mantener a su familia contra lo que haga falta, aunque algunos se queden en el camino…
Disfrútenla y, espero que sirva para que veamos cuales fueron las consecuencias de aquella crisis y que ahora padecemos, para no repetir el error.